27 de Octubre de 2010.- La fortificación minera es una importante contribución a la seguridad en operaciones subterráneas y cumple tres objetivos básicos: evitar derrumbes, proteger a los trabajadores, equipos, herramientas y materiales e impedir deformaciones de la cavidad subterránea. Sika enfrenta este desafío con el soporte y la infraestructura necesarios para satisfacer demandas vinculadas al proceso de estabilización del macizo descubierto por la excavación.
Una de las principales innovaciones para el reforzamiento de hormigón proyectado tiene como protagonista a las fibras sintéticas. En Sika esta tecnología está presente en la solución SikaFiber® MS, cuya función estructural es reemplazar a la malla metálica y/o fibra de iguales características. Su diseño la hace trabajable al momento de bombear y gracias a su menor peso específico permite optimizar la logística de traslado y almacenamiento. Además, no sufre corrosión y permite una operación más segura en túneles y para soporte de roca. Esta innovación es compatible con todos los aditivos, ya que su acción en el hormigón es mecánica, no afectando su proceso de hidratación.
Junto a las fibras sintéticas, Sika posee alternativas complementarias para obtener óptimos resultados y que cumplen con los altos estándares exigidos por la minería. Se destacan el aditivo para hormigón proyectado Sika Viscocrete HS CL, los acelerantes de fraguado libres de alcalis Sigunit® STM AF Plus y Sigunit® STM AF y el aditivo para lechar pernos Sika Fluid, fruto de las continuas investigaciones de la compañía suiza y que revolucionó las operaciones de consolidación de roca.
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