Chile
Estatal trabaja con McKinsey, firma que, además, la asesora en la elaboración de plan de negocios en la Región de Magallanes para la explotación de gas no convencional.
Viernes 27 de Mayo de 2016.- El derrame de petróleo en la bahía de Quintero de mediados de este mes dejó en evidencia la seguridad de las instalaciones de Enap, uno de los principales riesgos que hoy parece enfrentar la compañía estatal.
Es por esto que desde fines del año pasado el directorio de la petrolera busca identificar sus principales riesgos en todos los ámbitos: activos, finanzas y su imagen reputacional.
Ante esto, consigna La Tercera, Enap decidió contratar en noviembre de 2015 a la consultora McKinsey, cuyo trabajo tiene como foco la introducción de mejores prácticas en la identificación y gestión de riesgos, que pudiesen afectar a la empresa y el desarrollo de su plan estratégico a 2025.
Desde Enap, sostiene la publicación, señalaron que decidieron tomar el apoyo de McKinsey para “redefinir su modelo actual de gestión de riesgos, comparándolo con el de las empresas del rubro Oil & Gas que se ubican en el primer cuartil de las compañías que se destacan en esta materia”.
La estatal agregó que la asesoría incluirá la elaboración de fórmulas “para mitigar de manera acelerada los riesgos más grandes de la compañía, la incorporación sistemática del factor riesgo en las decisiones de negocio y generar un modelo de gobierno corporativo robusto para la gestión de riesgo”.
Los informes con las conclusiones que realice la consultora, estarán finalizados alrededor de julio de este año, y a partir de esa información, Enap comenzará el proceso de implementación de los resultados.
“La compañía debe visualizar y gestionar de forma integral todos los riesgos del negocio, de forma de evitar sus impactos en el medio ambiente y las zonas de influencia, en sus activos, proyectos, finanzas y en la imagen reputación de Enap”, afirmaron desde la compañía a matutino.
Diagnóstico
El diagnóstico preliminar realizado por la consultora estableció 14 puntos y las brechas existentes en cada uno de ellos, entre la situación de Enap y de las empresas de petróleo y gas del primer cuartil.
Un ejemplo de lo anterior, es la brecha existente en el ítem estrategia de riesgo, donde el diagnóstico ubica a Enap muy por debajo de las firmas del sector.
La consultora, en su análisis, también estableció como punto “crítico” el fortalecer la organización y su gobierno, para asegurar la sostenibilidad de la compañía.
McKinsey estableció en su diagnóstico cinco dimensiones de análisis: identificación estructurada de riesgos, estrategia y definición de apetito de riesgo, toma de decisiones y seguimiento, organización y gobierno corporativo, y cultura de riesgo.
La primera dimensión abordada por la consultora fue la relacionada a la organización y gobierno corporativo. En dicho rango, analizó el modelo de gobierno corporativo para la gestión de riesgos. Además, realizó un análisis de “megariesgos” y el diseño de un proceso que asegure que la visión de estos se mantendrá vigente en el tiempo.
Enap planteó que, respecto de las medidas tomadas a partir de la información preliminar, “se decidió priorizar los ajustes estructurales a la organización y al modelo de gobierno, así como la identificación acelerada de los principales riesgos, a través de un análisis holístico y calibración de herramientas de Enap”.
Plan Magallanes
A comienzos de año el Servicio Geológico de Estados Unidos confirmó la existencia de un importante potencial de gas no convencional en la Región de Magallanes (un promedio de 8,3 trillones de pies cúbicos), lo que llevó a Enap a definir una estrategia respecto a su explotación.
La firma estatal definió un plan de negocios para la explotación de gas no convencional en Magallanes, lo que también contará con la asesoría de McKinsey.
Desde Enap confirmaron que “un equipo de McKinsey ha estado apoyando el trabajo que ha desarrollo el equipo de Enap Magallanes en la elaboración de un plan de negocios para los próximos años que asegure hacer sustentable en el tiempo las operaciones en la zona”.
La compañía agregó que, tanto el equipo de la consultora como el propio, deberán incluir en dicho plan aspectos relacionados a asegurar el suministro para la Región de Magallanes, además de “potenciar el desarrollo del recurso no convencional disponible, rentabilizando las zonas de explotación e implementando ahorros en los costos de operación”.