Chile
Se trata de MUCH, una innovación corporativa creada por académicos de la Universidad de Chile que es aplicada desde fines de los 90.
Lunes 16 de Febrero de 2015.- A fines de los 90, un grupo de académicos de la Universidad de Chile -liderados por el ingeniero industrial Rafael Epstein- fue contactado por Codelco para concretar una misión.
La estatal les pidió replicar en la minería un modelo que desde los 80 era ejecutado por el grupo en la industria forestal, relativo a la optimización de distintos procesos vinculados con el uso de camiones, el transporte, los caminos y la planificación.
El desafío fue aceptado y el proceso se inició en la División El Teniente, el yacimiento de cobre subterráneo más grande del mundo, que comenzó a ser explotado en 1905 y que se encuentra ubicado en las cercanías de Rancagua.
La meta también fue definida de manera más precisa: formar un modelo de optimización para la planificación minera de largo plazo, pero considerando los cambios en el precio del cobre, “los costos, beneficios y el valor del negocio”, rememora Epstein.
Así, el grupo en el que también participan los académicos Marcel Goic, Andrés Weintraub, Sergio Gaete y Felipe Caro, entre otros, inició su trabajo, contactándose con profesionales que entonces eran claves para la operación: el ex gerente de Minas de la División, André Sougarret -hoy gerente general de Minera Centinela, del grupo Luksic-, y el actual vicepresidente de Operaciones Norte de Codelco, Octavio Araneda.
El intercambio de información, relata Epstein, fue de gran relevancia, pues permitió ir alcanzando las metas. Incluso el nombre de la iniciativa, cuenta, fue idea de los propios mineros: MUCH(Modelo Universidad de Chile).
Con el paso del tiempo, se logró constatar que la tecnología -que es aplicada a través de un software- fue exitosa. A la fecha, se sabe que permite ahorros por alrededor del 5% del valor total del negocio, es decir, de cientos de millones de dólares.
Con los buenos resultados, a inicios del 2000 la estatal quiso replicar el modelo en otra de sus divisiones, pero que tenía características totalmente distintas a las de El Teniente.
Se trataba de Chuquicamata, yacimiento localizado en las cercanías de Calama, que cuenta con el rajo abierto más grande del mundo y cuyos recursos son explotados desde tiempos prehispánicos.
“El plan lo iniciamos en el 2001 y entró en funcionamiento un par de años después. Ahí, construimos un sistema que integra una mina de rajo abierto, otra subterránea y que incluso permite la competencia entre ellas”, cuenta el experto.
Codelco, en la actualidad, desarrolla en esa división el proyecto Chuquicamata Subterránea (US$ 4.200 millones), con el cual la operación dejará de ser un yacimiento de rajo abierto.
Hoy, la tecnología MUCH ya es aplicada en casi todas las operaciones de la estatal.
¿En qué consiste la tecnología?
La herramienta MUCH es computacional y puede aplicarse en proyectos greenfield (que parten desde cero) y brownfield (que aprovechan instalaciones ya existentes). Esta tecnología requiere de un computador con alta capacidad, ya que arroja reportes gráficos.
El modelo toma como input toda la geología de la mina, los costos, los botaderos, los factores de planta y optimiza el proceso a 20 años o más. Todo, con el objetivo de identificar qué procesar y, con ello, mejorar las mezclas de concentrado.
Dentro de su análisis considera, además, las fluctuaciones del precio del cobre, por lo que la evaluación de un proyecto refleja la flexibilidad real que la operación tiene, posibilitando el mejoramiento del valor presente de la iniciativa y admitiendo financiamientos más económicos.
En suma, optimiza el desarrollo, la inversión y los planes mineros de un yacimiento en forma sistemática y no por etapas.
“En la minería siempre hay mucha duda sobre qué procesar y qué no, porque hay rocas con más o menos cobre. Entonces, la pregunta es qué procesos seguir”, señala Epstein.
Explica que una vez que se identifica qué procesar -considerando variables como el precio del cobre, las leyes, la presencia de otros minerales y de contaminantes-, se define el destino de la muestra.
“Puede ser una electroobtención, si es un óxido, o una concentradora, si es un súlfuro. También, puede ser un botadero o inventarios de baja ley, que se usan mucho en el norte”, afirma el acádemico.
Por lo fluctuante del precio del cobre, añade, el modelo arroja diferentes planificaciones acordes a escenarios con precios distintos. “En vez de dar un plan minero, se da una estrategia de planes mineros que pueden reaccionar correctamente de acuerdo a cada situación de mercado. Eso es novedoso a nivel mundial y sólo se aplica en Codelco”, señala.
Los próximos pasos
Considerando el éxito que ha tenido la innovación, Epstein adelanta que el próximo paso será extender el producto al resto de la minería.
En esa línea, comenta que ya se han iniciado conversaciones con algunas compañías del rubro que podrían adoptar el modelo.
“El sistema tuvo mucho éxito, resolvimos técnicamente problemas que no se habían resuelto de forma práctica”, asegura.
Como ejemplo de lo anterior, destaca, en noviembre del año pasado el paper sobre la optimización en la planificación minera de largo plazo, que representaba en gran medida el trabajo hecho en Codelco, fue premiado como el mejor escrito en Recursos Naturales del 2014 por el Institute for Operations Research and Management Sciences (INFORMS), de Estados Unidos.
La Tercera