Perú
23 de Septiembre de 2010.- Mediante un Decreto Supremo, el gobierno de Bolivia dispuso la importación de 10,000 toneladas de cemento para satisfacer la demanda de la construcción y de las obras públicas ante la insuficiente oferta por parte de las industrias nacionales.
En una conferencia de prensa en el Palacio de Gobierno, en La Paz, la ministra de Planificación para el Desarrollo, Viviana Caro, precisó que el cemento será importado de la empresa Cementos Yura de Perú y será comercializado a razón de un boliviano el kilogramo.
Dijo que la decisión fue adoptada debido a "los problemas de abastecimiento de cemento registrado los últimos meses que han impedido proseguir con las obras de desarrollo".
Se ha descartado una subvención estatal a los precios del producto, refiere la información divulgada por la agencia oficial ABI.
Caro señaló que, en forma paralela, se abrió la posibilidad de que las empresas privadas bolivianas que decidan importar cemento o insumos que incrementen su producción pueden hacerlo para que el mercado cuente con la suficiente cantidad de este material de construcción.
Adelantó que igualmente se promoverá que la Fábrica Nacional del Cemento Sociedad Anónima (Fancesa) pueda acelerar sus proyectos para el incremento de sus volúmenes de producción.
Fancesa fue estatizada totalmente las pasadas semanas al pasar el 33,4 por ciento de sus acciones a la Gobernación de Chuquisaca. Esas acciones estaban en poder de la privada Sociedad Boliviana de Cemento (Soboce).
El cemento a importarse será comercializado por la empresa estatal Insumos Bolivia.
A su vez el ministro boliviano de Obras Públicas, Walter Delgadillo, sostuvo que, en forma paralela el gobierno impulsará la construcción de dos fábricas de cemento, que podrían entrar en operaciones en unos dos años (Andina).
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