Internacional
12 de Octubre de 2010.- Enel podría completar esta semana la flotación en bolsa de su filial Enel Green Power, en lo que podría ser la mayor oferta pública inicial este año en Europa.
La eléctrica italiana persigue reducir su deuda en unos 3.000 millones de euros (unos US$ 4.180 millones) siguiendo los pasos de otras empresas de energía que han listado en bolsa sus negocios renovables durante los últimos años para beneficiarse de la alta demanda del mercado por títulos para los que se esperaba un alto crecimiento, como las de tecnologías "verdes".
Sin embargo, la realidad está cambiando. Rivales de la italiana, como Iberdrola Renovables y EDF Energies Nouvelles han tenido un mal desempeño durante los últimos doce meses, golpeadas por los recortes a los incentivos públicos a las energías limpias.
Escasa demanda
Las dudas respecto de la rentabilidad de estas empresas sin soporte del estado se nota en las bolsas. Luego de un aumento en las inscripciones a fines del año pasado, sólo siete empresas de energías renovables han manifestado su interés de abrirse a bolsa este año. Por otro lado, tres compañías chinas que habían planeado listarse han decido echar pie atrás por falta de demanda, indica el periódico británico, Financial Times.
El retroceso también lo expone el índice de energías renovables de Merrill Lynch de Europa, que ha perdido la mitad de su valor desde su peak en 2008, y algo parecido le ha pasado en Estados Unidos, donde cayó 60%. El mismo panorama se puede apreciar en el Índice Global de Energías Alternativas de S&P, que agrupa a más de 50 compañías del sector de energías renovables (como Japan Wind Development y Vestas) y que en mayo de 2008 marcaba 3.397, pero que la semana pasada sólo alcanzó los 1.706,02.
Falta de incentivos
Los analistas apuntan a que la falta de desarrollo de proyectos ha mermado el interés de los inversionistas, y la falta de financiamiento de las compañías ha sido la gran responsable. Los gobiernos venían subsidiando hace tiempo al sector, pero la política interna, los problemas fiscales por la crisis y la caída en los precios del petróleo han cortado esta fuente de recursos.
En EE.UU. la administración Obama lanzó un programa de ayuda que entrega un beneficio tributario a la inversión de 30% a los desarrolladores de energías limpias en forma de préstamos en efectivo para construir. Sin embargo, está previsto que la ayuda financiera gubernamental, que sostuvo a la industria durante la recesión, desaparezca el 31 de diciembre de este año.
El problema es que mientras las energías "verdes" no sean rentables, la industria seguirá dependiendo de incentivos y subsidios para mantenerse vivos.
"Estamos 50% por debajo este año y estaremos 50% por debajo el próximo año sin el incentivo", comentó a un medio estadounidense el director ejecutivo de la firma eólica Pattern Energy, Michael Garland. "No se puede esperar que la industria sobreviva a un escenario como éste", añadió.
El sector ha sufrido por el descenso en los precios para la generación de energía impulsada por combustibles fósiles (DF).
Portal Minero