2014/10/30
Cómo la tecnología puede proteger la producción energética
Last changed: oct 30, 2014 11:35 by Editor Portal Minero Labels: axis, andrei, junqueira
Andrei Junqueira, Axis
En Sudamérica, uno de los grandes desafíos del sector energético es optimizar su desempeño y, de esta manera, atenuar el desequilibrio debido a la desigual distribución geográfica de los recursos y asimetrías entre los niveles de desarrollo tecnológico en los distintos países. Según datos del sector, se estima que en los próximos años haya un crecimiento de entre el 7 y el 10 por ciento en la demanda energética, con lo cual las empresas deberán estar preparadas para afrontar este escenario y lograr abastecer el mercado de la manera esperada.
Tanto en los campos marítimos en medio del océano, como en las usinas de biodiesel en el interior del país, todo el sector de energía enfrenta los mismos desafíos de seguridad, tales como robos, roturas de equipos y depredaciones. La buena noticia es que en los últimos años nuestra región pasó a contar con empresas que construyeron un amplio expertise en países como Brasil y Venezuela sobre la protección de esos ambientes, mientras el desarrollo tecnológico hizo posible que el videomonitoreo en red permitiera integrar seguridad al control de producción, a partir de un único sistema.
Antes las cámaras servían sólo para vigilancia, hoy pueden auxiliar en el control de acceso de toda la propiedad, eliminando por ejemplo, reacciones innecesarias a falsas alarmas de invasión, por medio de la verificación visual. También pueden ayudar a monitorear los procesos de la planta de producción, y por estar conectadas a la red, pueden ser administradas tanto en una sala de control local como en forma remota.
Lo que muchos integradores de sistemas han hecho al ser contratados para proteger infraestructuras críticas, es pensar en la protección como una serie de círculos concéntricos: primero el perímetro, luego los edificios y por último la producción de energía como tal.
Estos proyectos se enfocan en tres aspectos vulnerables: el perímetro (extensos y muchas veces mal iluminados), las entradas y salidas de los edificios (bajo el constante riesgo de facilitar el acceso de personas no autorizadas o en horarios no previstos), y las áreas con el mayor potencial de peligro (lo que depende de cada planta). Estos son los principales puntos en los que se puede perder ganancias debido a la interrupción en la producción y a las reparaciones costosas.
Hay una gran cantidad de tecnologías de protección al perímetro como sensores y radares. En el caso de las cámaras térmicas, cualquier presencia no autorizada es detectada, y son lo suficientemente inteligentes para desechar eventos climáticos y distinguir la presencia de animales. Si esto se integra a cámaras de imagen de alta definición y recursos para adaptarlas a condiciones desfavorables de iluminación, se llega a otro nivel de análisis del hecho que disparó las alarmas, y a una mayor precisión para definir la reacción necesaria.
Es una combinación eficiente para monitorear áreas vulnerables como ductos en áreas remotas y despobladas. En este caso, cámaras con transmisión wireless también hacen la diferencia, aunque cada vez más se utilice la fibra óptica para largas distancias ya que su costo ha bajado mucho en los últimos años.
En el área de los edificios, lo importante es controlar los accesos y el flujo de personas en las áreas críticas. Por ejemplo, en caso de una evacuación de emergencia, los sistemas de vigilancia pueden auxiliar al equipo de rescate para que éste se asegure de que no haya nadie en el edificio.
Y aunque proteger la propiedad y las personas sea esencial, también es importante monitorear los procesos de producción, garantizando que las reglas de seguridad se cumplen y los equipos son manejados adecuadamente. Las cámaras inteligentes pueden mejorar la supervisión en áreas sensibles, proporcionando un mecanismo de inspecciones visuales de varios locales al mismo tiempo sin la presencia física en el local. Además, la adhesión a una plataforma de patrones abiertos garantiza la integración de los recursos de video con componentes de producción, equipos y software.
En esencia, un sistema en red permite que todos puedan estar virtualmente presentes en cualquier lugar de una instalación y trabajar en conjunto para lograr la mejor protección posible.
Andrei Junqueira es Gerente de Desarrollo de Negocios de la empresa Axis Communications Portal Minero
2014/10/23
Réquiem para la bahía de Quintero
Last changed: oct 23, 2014 15:01 by Editor Portal Minero Labels: pedro, utfsm, académico, serrano
Pedro Serrano, Académico UTFSM
En algún momento, hace un par de años, describimos cómo la zona de Puchuncaví y Ventanas se había convertido en una “zona de sacrificio”, una definición –no admitida en nuestra ley– que busca calificar aquellos territorios donde el abuso ambiental de industrias y prospecciones de todo tipo, convierten un espacio con anterioridad poblado y sano, en una zona con su suelo, su aire y sus aguas, contaminado e insalubre para desarrollar la vida humana, animal y vegetal.
Con sus varias termoeléctricas, sus industrias químicas, su puerto de desembarque de carbón y de petróleo, su terminal de gas natural licuado, su fundición de cobre, todas ellas durante varios años han emitido metales pesados, dióxidos de azufre, desincrustantes y un largo etcétera. Según la historia, el desastre se inició hace unos 50 años. En todo ese tiempo, el Estado de Chile ha logrado establecer una paradigmática zona de sacrificio, paradigmática en términos de ser un ejemplo o modelo de aquello que nunca debió suceder.
Con altos índices de cáncer, los mayores de nuestro país, con episodios repetidos de contaminación del aire con dióxido de azufre, en la trágicamente famosa escuelita de La Greda, la recomendación humanamente aceptable era considerar que dicho territorio no es habitable y no lo sería por muchos años más. Tal grado de contaminación es irreversible en muchas décadas a futuro, aun cuando el proceso se detuviese hoy. Debiera ser un deber moral, cívico, de salud, de derechos humanos, trasladar sus habitantes a lugares equivalentes, indemnizarlos por todas esas muertes y sufrimientos y –honestamente– aceptar que el concentrado desarrollo industrial de esa área, al no tener consideraciones ambientales y humanas profundas en su planificación y desarrollo, ha logrado la creación de una “zona de sacrificio” irremediable.
Sin embargo, lo anterior pasaba en tierra firme, la que rodea lo que conocemos como la bahía de Quintero, otrora fértil en productos del mar, tanto en peces como en moluscos y crustáceos, con praderas marinas de cochayuyo y luche.
Actualmente hay dos antiguas comunidades de pescadores en esa bahía, con zonas de cultivos marinos. Donde antes estaban los changos en sus balsas de cuero de lobo marino, donde abundaban las machas, los locos, las almejas, los congrios, las viejas y los pejeperros. Actualmente, el fondo es un desierto fangoso y estéril y con un mar sobre el que se han derramado aguas servidas, ácido sulfúrico, carbón mineral, aguas de refrigeración de termoeléctricas con toneladas de desincrustantes, aguas además calientes y mortales, cientos de toneladas de día y noche por muchos años y al final, por supuesto, y varias veces, derrames importantes de petróleo crudo cuya infinitésima capa de disolución cubrirá toda la superficie de la bahía.
??La bahía de Quintero ya está biológicamente muerta, habrá que aceptarlo; cualquier cosa que se pesque o cultive en el mar –también en tierra–, estará sometida a ambientes tan tóxicos, que si lograsen crecer allí, serían un peligro para los humanos.
Los desincrustantes han matado todos los moluscos, ha habido varazones de sardinas, pobrecitas ellas, que son migratorias y tuvieron la mala suerte de entrar a la bahía; en resumen, los pescadores locales saben perfectamente que su bahía ha sido biológicamente asesinada por nuestro estilo de desarrollo. El progreso ha generado una extensa área de sacrificio y una bahía de inmolación industrial.
Quienes habitan allí y vivían de la agricultura, la pesca o simplemente vivían; debieran emigrar, por salud y protección de sus vidas. Debieran ser compensados por las empresas que han lucrado con el territorio y el Estado que ha permitido el desastre durante 50 años. No se le puede mentir a la gente. La civilización ya los ha expoliado; someter a las futuras generaciones locales a tal grado de toxicidad territorial resulta irresponsable, esto no es alarmismo es una constatación -–si lo quieren– estadística.
Aquí durante muchos años hemos irrespetado los derechos humanos de numerosas familias rurales locales. Por supuesto, nadie se quiere ir de su territorio, donde nació creció y crió a su hijos; es difícil asumir que la situación es peligrosa, que las dosis de contaminantes se adquieren de a poco, que el cáncer se viene arrastrando desde la infancia…
Lo que estoy planteando es que en este caso –como otros en Chile–, estamos ante una responsabilidad país, sectores público y privado incluidos. Que en 50 años son muchos los gobiernos culpables. Pero, que a esta altura de la Historia, el año 2014, habría que admitir que el territorio de Puchuncaví y Ventanas y la bahía de Quintero, son zonas de sacrificio industrial peligrosas para desarrollar la vida humana.
Pedro Serrano Rodríguez es Académico del Departamento de Arquitectura de la Universidad Técnica Federico Santa María. Portal Minero
2014/10/16
Tecnologías de la Información: vitales para la industria minera
Last changed: oct 20, 2014 18:37 by Prensa Portal Minero Labels: minería, merino, ti, columna
Según datos de la Sociedad Nacional de Minería, durante el septenio 2006-2012, la industria minera contribuyó con el 15,7% del PIB de Chile, generando exportaciones anuales por USD 44.000 millones en promedio, un 64% de los envíos totales del país. Estas cifras reflejan la importancia de este rubro para el desarrollo del país, donde las empresas alineadas con este rol estratégico buscan ser más competitivas, modernas y sustentables, con un liderazgo reconocido en el mercado global de la minería. Las Tecnologías de la Información juegan un papel preponderante en este rubro que ha sido pionero en su adopción e uso intensivo para mejorar la eficiencia de sus procesos productivos y garantizar la seguridad de su capital humano, uno de los aspectos críticos de esta industria. Hoy los principales desafíos son mejorar la competitividad, con altos estándares de seguridad y sustentabilidad en sus procedimientos. Para esto, debe contar con proveedores tecnológicos que entreguen servicios de excelencia, y al mismo tiempo sean confiables, con solidez financiera y capacidad de inversión para embarcarse en proyectos, muchos de ellos en condiciones extremas (localidades en altura o con escasa o nula conectividad). Por ello, es clave el desarrollo e implementación de soluciones tecnológicas que den respuesta a estos desafíos. Por ejemplo, los Sistemas Integrados de Gestión Minera, que se posicionan sobre los sistemas productivos y el ERP, entregando una visión integrada de todo el proceso minero para tomar mejores decisiones operativas (ojalá en tiempo real). Para manejar maquinarias de manera remota, especialmente aquellas expuestas e inhóspitas para un operador humano, existen sistemas de automatización y robótica de procesos. Mientras que para apoyar la mantención, continuidad operativa y vida útil de equipos de alto costo, entre otros aspectos, se han desarrollado sistemas para la predicción de fallas en equipos mineros. Soluciones como éstas son claves en el ámbito de las TICAR (Tecnologías de la Información, Comunicaciones, Automatización y Robótica) de las empresas mineras, donde los esfuerzos están volcados hacia los procesos core de la minería. Hoy se concibe el área tecnológica como una entidad que agrega valor al negocio mediante un ciclo de mejora continua, lo que convierte al proveedor de tecnologías en un verdadero aliado clave de negocios. Al mismo tiempo, como los minerales hoy son commodities en el mercado internacional de valores, la industria minera se centra en la reducción de costos y el cumplimiento de cuotas de producción. Sin embargo, en los últimos años han surgido nuevos desafíos que se desprenden de mineralogías más complejas, requerimientos ambientales más estrictos y el creciente costo de la energía, siendo cada vez más necesarias las nuevas tecnologías para enfrentarlos de manera eficiente. Alberto Merino es Gerente de Desarrollo Comercial para Latinoamérica en SONDA. Portal Minero
2014/10/09
Crecer por medio de Adquisiciones, una Decisión Estratégica
Last changed: oct 09, 2014 11:54 by Prensa Portal Minero Labels: empresa, adquisiciones, bruno
Rubén Bruno, Gerente TOTVS Consulting Cono Sur
La madurez de la economía chilena hace propicia la alternativa de crecer por medio de fusiones y adquisiciones. Esto se puede dar en variados sectores de la economía como en el de la Energía e Industriales.
Esta estrategia trae la oportunidad de apalancar resultados y aumentar, con rapidez, la participación de la compañía en el mercado. Es muy difícil encontrar un líder de industria que no haya reforzado su estructura a lo largo de los años por la compra de empresas. Algunos grupos se tornan, inclusive, consolidadores de mercado, haciendo adquisiciones en serie. Sin embargo, para generar buenos resultados, la operación no debe ser vista como un fin en sí, sino como una herramienta para que la empresa ejecute su estrategia de crecimiento.
Para lograr una operación exitosa hay un largo y delicado camino que recorrer: desde la validación de las sinergias entre la compradora y la comprada antes del acuerdo, hasta el acompañamiento de los resultados de adquisición. Todo comienza con el alineamiento estratégico de la visión y de los objetivos en relación a la empresa y el desarrollo de un plan de negocios para la nueva configuración de la compañía. Realizar una proyección del escenario considerando, por ejemplo, qué mercados serán atendidos y cuáles líneas de productos serán mantenidas o discontinuadas.
La próxima etapa de la operación es un análisis detallado de los recursos – financieros, humanos y tecnológicos – de la empresa adquirida. La tarea será la base para los planes de transición e integración. Un punto crítico para el éxito de la operación está en el proceso de integración, que tiene que ser realizado de forma de mantener la productividad y potencializar las utilidades del negocio.
Integrar una empresa adquirida implica un largo proceso rumbo a la consolidación. Esta transformación puede llevar hasta tres años y exige disciplina, perseverancia y un seguimiento atento de cada fase. La integración se da por etapas. Áreas administrativas y financieras, por ejemplo, pasan a trabajar de forma sinérgica durante cerca de un mes, en lo que respecta a cuestiones operacionales y de infraestructura pueden llevar más de un año para quedar alineadas. Será requisito fundamental para definir las bases, la integración, el trabajo de planificación y de validación financiera, realizados antes de la compra.
Tener un equipo enfocado en la integración y que no realice tareas operacionales, ayuda a perfeccionar los resultados. Para ayudar en esta operación, puede ser beneficioso contratar estudios de abogados que se dediquen a cuestiones contractuales y recurrir a empresas de consultoría de negocios especializadas en fusiones y adquisiciones. La asesoría acompaña la transacción desde las primeras evaluaciones hasta la implementación de los sistemas y procesos integrados.
Más allá de los aspectos jurídicos y económicos, una compra coloca lado a lado culturas organizacionales diferentes y causa incertidumbre entre los colaboradores. Cambios en la política de carrera siempre implican un riesgo de perder capital humano. Por eso, alineando la planificación y la ejecución de cada etapa de adquisición, se acompaña un comportamiento transparente y llevado a cabo por los líderes de las empresas involucradas, que será fundamental para el éxito de la operación.
Para el profesional de TI, la integración entre empresas puede representar un enorme desafío y algunos años de proyecto, desde su concepción y arquitectura hasta la conclusión de la convergencia de sistemas administrativos y operacionales.
TOTVS es una empresa de software, servicios y tecnología con presencia en diversos países de América Latina. Es uno de los mayores desarrolladores de sistemas de gestión integrada (ERP) del mundo. Portal Minero
2014/10/01
¿Cómo atraer a las nuevas generaciones a la Minería?
La minería es el motor económico de Chile. Somos un país minero y, en este contexto, debemos analizar los grandes retos que tiene este sector en la actualidad. Cómo las empresas mineras solucionan el problema de la energía (el agua es parte de esto), y de qué forma demuestran compromiso y responsabilidad dentro de las comunidades en que están insertas son hoy dos grandes desafíos en los cuales trabajar. A éstos se suma uno de gran relevancia y en el cual las compañías del área minera deben poner gran atención: la escasez de capital humano y, con ello, la escasez de personal calificado técnico y profesional. Si uno piensa en estos factores, al que se suma el pleno empleo en que se encuentra Chile y el problema estructural de nuestro país que es la centralización, las mineras se enfrentan a un escenario complejo, en que ya no basta tener las remuneraciones más altas ni bonos extras. De esta manera surge la pregunta: ¿cómo estas empresas atraen a este segmento a trabajar en operaciones mineras complejas, muchas de las cuales se encuentran en altura, bajo temperaturas extremas, en lugares apartados, alejados de las ciudades más cercanas, varias de ellas poco atractivas ya que no poseen el nivel de desarrollo ni calidad de vida de Santiago? Lo cierto es que hoy no es llamativo vivir en una región minera, sobre todo para las nuevas generaciones, las que no están dispuestas a dejar su ciudad sólo por un excelente sueldo; ellos quieren vivir en un entorno que les entregue una buena calidad de vida y un desarrollo personal que los satisfaga. Por lo tanto, la única manera de que las compañías mineras reviertan esta situación es apoyando, en una lógica pública y privada, el desarrollo de las urbes que se ubican cerca de sus faenas. ¿En qué se traduce esto? En llevar a cabo una inversión a largo plazo en áreas como la educación, salud, seguridad, cultura, deporte, esparcimiento; en síntesis, en calidad de vida. Para lograr un efecto próspero a mediano y largo plazo se requiere de una planificación, alineamiento, esfuerzo y trabajo mancomunado entre la empresa privada (no sólo una) y el Estado, tal como ha sucedido con éxito en otras metrópolis del mundo que se ubican cercanas a faenas mineras. En Chile, se han hecho ciertos esfuerzos como por ejemplo el proyecto “Viva Antofagasta”, iniciativa del municipio de esta ciudad y Minera Escondida. El eslogan invitaba a “vivir” en el lugar, a proyectarse en éste y a “vivir” en un entorno entretenido; con playas, clima y paisajes espectaculares, poca congestión, más vida en familia, entre otras ventajas. Este tipo de acciones logra que los individuos que no han nacido en ciudades mineras, con el paso de los años, sientan un alto arraigo y pertenencia; cosa que en la actualidad no ocurre y sucedan situaciones tan impactantes como la que experimenté en un antiguo trabajo. Cuando me tocaba hacer algún proyecto social con personas que no eran oriundas de Antofagasta, pero vivían hace 30 o 40 años en ésta, les preguntaba a cuántas de ellas les gustaría ser enterrada en el lugar y la gran mayoría, alrededor de un 80 por ciento, respondía que no, que deseaban que los sepultaran en su ciudad o pueblo de nacimiento. Si las empresas mineras desde ahora se involucran en los procesos de mejora de la calidad de vida de las urbes cercanas a sus operaciones y en todo lo que ello involucra, esta respuesta en el futuro cambiará. Para los profesionales y técnicos de las nuevas generaciones será una excelente opción vivir en una ciudad minera porque ésta les entregará todo lo que esperan para el desarrollo propio, el de sus hijos y familia. Pedro Del Campo, Gerente General Proforma Portal Minero
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