Chile
Empresas como Codelco y Collahuasi están tomando medidas.
25 de Enero de 2010.- La minería chilena está anticipándose para enfrentar un escenario en que sus consumidores a nivel internacional le exigirá contar con información detallada respecto de su huella de carbono, imitando lo que sucede hoy con algunos productos forestales y agroindustriales.
Por ello, empresas como Codelco y Collahuasi están ejecutando una serie de proyectos tendientes a identificar los niveles de emisiones directas e indirectas de gases de efecto invernadero, asociados a la producción de cobre y sus subproductos.
Hasta ahora en este sector el mayor exportador del país el tema de la huella de carbono no había cobrado relevancia, porque China, su mayor mercado, es líder a nivel mundial de este tipo de emisiones y, por ende, aún no exige trazabilidad a sus producto. Sin embargo, ahora en el sector están conscientes de que es “inminente” que las exigencias vienen y Europa podría ser el destino más exigente en esta materia.
En esta línea el año pasado Codelco inició el trabajo y actualizó sus cálculos tanto de emisiones de gases como de huella de carbono, a partir de datos de su operación de 2008.
Inventario de emisiones y energías alternativas
Además, la compañía completó la fase I del denominado Inventario de Ciclo de Vida del cobre, impulsado por la Asociación Internacional del Cobre, que identificará la huella de carbono a través de un catastro de los recursos consumidos y las emisiones directas generadas por el uso de combustibles en la operación de sus divisiones, así como de las indirectas provenientes de la generación de energía que usa la estatal. Este trabajo se hizo extensivo a toda su cadena de proveedores y distribución, de donde obtienen los insumos para procesar el cobre.
Estos resultados, dijeron en la cuprera, se conocerán este año.
La firma además está fomentando el uso en sus instalaciones de energías renovables no convencionales (ERNC), por ejemplo en Gaby, División Norte, donde en algunos procesos se utiliza energía solar.
En esa misma línea, Collahuasi yacimiento propiedad de Xstrata (44%), Angloamerican (44%) y Mitsui (12%) está desarrollando estudios sobre el potencial geotérmico de las cinco concesiones que poseen en la Región de Tarapacá.
A su vez, está ejecutando un programa de eficiencia energética enfocado en reducir su consumo, lo que junto con disminuir sus costos de operación permite bajar las emisiones de gases efecto invernadero.
En la compañía explicaron que esta iniciativa contempló el desarrollo de un perfil de consumo energético de sus operaciones el cual es monitoreado en forma mensual, lo que permite identificar la áreas y los procesos productivos en los que se puede optimizar el consumo.
Necesidad de un modelo país
Pese a que destacó las iniciativas que desarrollan las mineras, el gerente general de la consultora Aquiles, y especialista en el tema, Daniel Barreda, señaló que éstas se basan en una política de sostenibilidad más que en la reducción de emisiones.
Esto, dijo Barrera, debido a que falta una iniciativa gubernamental para la reducción de emisiones, la cual se podría sustentar a partir del compromiso de bajar en 20% este ítem al año 2020, que Chile suscribió en la Cumbre de Copenhague, .
“Las iniciativas individuales en energías alternativas adoptadas por las mineras beneficiarán la reducción de las emisiones, pero falta una iniciativa global, porque la pauta tiene que venir del gobierno, que influya en todos los sectores productivos”, dijo.
Sector duplicaría emisión de gases invernadero a 2020
Según cifras de la Comisión Chilena del Cobre (Cochilco) si para 2020 la industria minera chilena alcanza una producción de cobre fino de 7,37 millones de toneladas métricas, lo que supone un aumento de 38% respecto de 2008, y mantiene su comportamiento actual de consumo energético, duplicaría sus emisiones de gases efecto invernadero, alcanzando 36,54 millones de toneladas de CO2 equivalente.
Sin embargo, la entidad precisó que en caso de que la industria ejecute los proyectos tendientes a aumentar la producción de la mano de programas de eficiencia energética, podría lograr un ahorro de 23% en su consumo de energía, generando una disminución de emisiones de 18%.
El estudio destacó que en los próximos 12 años entre el 70% y 79% de las emisiones indirectas provocadas por este sector provendrán del uso de electricidad, que en el norte del país, donde se concentra esta actividad, es de origen térmico en gran medida en base a carbón y diésel(DF).
Portal Minero