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A Mauro Valdés se le nota el amor por la minería. A penas comienza nuestra conversación, el tema lo hace explayarse cómodamente. Queremos saber quién es detrás de esta vasta trayectoria en la industria, y primero que todo, por qué la minería.
Martes 12 de Septiembre de 2017.- Abogado de la Universidad Católica, el actual presidente del Programa Alta Ley tiene una vasta trayectoria en el área. Minera Escondida, BHP y el Consejo Minero son algunas de sus estaciones más insignes.
Valdés trabajaba como abogado en un estudio en los tiempos en que recién se había abierto Escondida y Collahuasi. Las exploraciones estaban en plena etapa de “boom” a pesar de que los precios del cobre eran, francamente, malos. Es ahí cuando inicia su camino por la minería, cuando entró a la conversación sobre el Consejo Minero, situación que le permitió conocer tanto los dilemas como las ambiciones de la minería en esos momentos. Un atractivo desafío que lo llevó a ser, a sus 28 años, el primer Gerente General de dicha institución.
Después de eso, la minería pasaría a formar parte de su quehacer diario: “Me quedé para siempre pegado, absolutamente convencido de que la minería tiene la capacidad de cambiarle la cara a este país y que bien alineados los intereses, las visiones estratégicas entre el mundo privado y el mundo público, los resultados de esta actividad pueden ser tremendamente beneficiosos.”
Hoy, a la cabeza de Alta Ley, confiesa que lo obsesiona reflexionar sobre la necesidad del mundo con respecto a la minería y cómo esta debe estar al tanto de sus macrotendencias, incorporando en ella, por ejemplo, nuevas tecnologías “Yo creo que nuestra minería está en un punto de inflexión, en una encrucijada en que debemos apostar por ella. La minería requiere un poquito más de humildad en esta fase que viene porque por un lado, requiere insertarse mejor en su entorno, y por el otro, no tiene todas las respuestas, tiene que abrirse a ellas para su propia inserción y sus propios procesos.”
En ese sentido, reflexiona acerca de una minería asociada a tecnología de punta: “La pregunta de cuál va a ser el próximo ‘quiebre’ tecnológico en la minería yo creo que es bien válida y probablemente no sea algo tan brutal, pero es algo que está sucediendo en montones de otras industrias y latitudes y a lo mejor la minería tiene que mirarlos muy atentamente para los efectos de sumergirse oportunamente, sacar provecho y mantenerse como una industria viable."
Estas inquietudes son parte de lo que mantiene la cabeza de Mauro Valdés en constante reflexión, en una industria que le fascina. Sin embargo, aunque a ratos parezca difícil de imaginarlo, su vida no es sólo minería. Mauro es una persona que disfruta salir a caminar al Cerro San Cristóbal, con su familia y sus hijos. En el invierno le gusta esquiar, un deporte que también practica junto a los suyos.
Tiene un especial cariño por la Isla de Pascua, lugar que ha visitado una docena de veces: “Conozco harta gente por allá, tengo muchas historias y a mi familia les gusta también.” Posee la licencia de buceo, una actividad que disfruta enormemente, y cada vez que puede sale a explorar a los Motu (islotes) o a otros lugares de la Isla.
Limónov, de Emmanuel Carrère y Memorias de Adriano, de Marguerite Yourcenar son los libros que ocupan su velador por estos días. Es otra de las actividades que aprecia, aunque reconoce que a veces el trabajo le impide hacerlo. “He vuelto a una lectura más reposada. Hacer clases en la universidad es otra cosa que me ha llevado a leer más en el último tiempo. Me causa curiosidad tratar de digerir esos 'inputs' de lo que está pasando en el mundo y luego entregarlos en las cosas que enseño.”
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