Perú
En medio de las fuertes protestas que mantienen hace semanas opositores al proyecto minero en la provincia de Islay (Arequipa), el ejecutivo peruano ha desplegado múltiples esfuerzos para destrabar su realización.
Viernes 10 de Abril de 2015.- Durante la jornada de hoy viernes el Ministerio de Energía y Minas de Perú (MEM) presentará en la región de Arequipa un informe que elaboró sobre el Estudio de Impacto Ambiental (EIA) del proyecto minero Tía María, de Southern Perú, que busca aclarar dudas en torno al uso de las fuentes de agua que hará la iniciativa.
Así lo informó el ministro del Ambiente peruano, Manuel Pulgar, quien calificó el documento como “valioso”, ya que estudió cada una de las observaciones formuladas al EIA original del proyecto minero. El secretario de Estado señaló que con este documento se comprobará si el segundo EIA de Tía María, que ya fue aprobado; superó las observaciones realizadas al primer estudio, desestimado en 2011.
"Queremos presentar el informe el viernes. Ojalá se den las condiciones para presentarlo en la provincia de Islay", señaló Pulgar, quien reconoció que este informe se debió presentar antes. Todo en medio de fuertes protestas y una paralización indefinida que hace varios días mantienen opositores al proyecto en Arequipa.
Se trata principalmente de pobladores y campesinos del Valle del Tambo, que denuncian un peligro para la agricultura y el agua del valle, que a su juicio será contaminada por el proyecto. Para ellos, por ahora, no existen dos alternativas: piden el retiro definitivo de Tía María.
Tal es el clima de hostilidad que se vive en la región que, incluso, el pasado 27 de marzo el director de Relaciones Institucionales de Southern Copper, Julio Morriberón, aseguró que la empresa abandonaría el proyecto Tía María, cuya inversión se estima en cerca de USD 1.400 millones. Horas más tarde, el propio presidente de la firma, Oscar González Rocha, salió a desmentir la información y aseguró que la empresa se la jugaría por la continuidad del proyecto.
“Consideramos que el proyecto Tía María es relevante y será muy beneficioso tanto para la empresa, sus trabajadores, la población de la zona donde está localizado, así como para la región Arequipa y el país. Concretar dicho proyecto representa la recuperación de la confianza de la comunidad de inversionistas mineros”, dijo González a través de un comunicado de prensa.
En medio de las críticas por una supuesta falta de apoyo de la autoridad, la "advertencia" de la compañía logró una reacción de parte del gobierno, que desde entonces ha intensificado los esfuerzos para viabilizar la iniciativa. Se han multiplicado las acciones y declaraciones públicas del Ejecutivo, incluyendo al propio Presidente Ollanta Humala, que ratificó su respaldo a Tía María, comprometió una visita a la zona para "despejar dudas" y pidió a las autoridades trabajar para convencer a los opositores.
"Debemos trabajar de manera dialogante para explicar y convencer a la gente de que le dé una oportunidad a este proyecto bajo nuevas normas y un nuevo estudio de impacto ambiental que ha sido revisado", afirmó.
El mandatario acusó también a dirigentes de movimientos políticos y ambientales de recorrer el país para realizar "prácticas delincuenciales", para intimidar a la población y a las autoridades con el objetivo de paralizar los proyectos. "Aquí tienen que sumarse al esfuerzo el Ministerio Público, Poder Judicial y autoridades regionales para que todos lleguemos a una conclusión de este proyecto", dijo Humala.
En la misma línea, el nuevo jefe de gabinete de Perú, Pedro Cateriano, llamó a los habitantes de Islay a no oponerse de “manera irracional” al proyecto, y buscar soluciones a sus demandas mediante el diálogo. "La inversión genera riqueza y la única manera de desterrar la pobreza es precisamente generando riqueza", señaló. A su juicio, la población debe entender a Perú como un país minero, que tiene la necesidad y el potencial de aprovechar este recurso para desarrollarse.